1 mes: Cosas buenas y cosas malas.

Pues eso, que ya llevamos 1 mes por estas tierras. Ha sido un cambio radical en mi vida. Acostumbrada a ir a clase, vivir en un sitio bastante animado, poder conducir yo sola, tener gente en casa y, SOBRETODO, a vivir en España.
Esto es bastante diferente. Para los que sólo conozcáis Londres de ir unos días no opinareis lo mismo que estoy diciendo porque allí siempre hay gente, siempre está animado, la  gente sale a cenar, a tomar algo y a comprar hasta las 8 ó 9 de la noche. Pero no, en el resto de Reino Unido, y quitando a las grandes ciudades (aunque Manchester, por ejemplo, no me pareció tan animada a partir de las 7 de la tarde) poca gente sale a cenar, sobre todo familias, y además lo hacen temprano; las tiendas cierran a las 5.30 y los sitios para tomar algo por ahí también (quitando pubs). El caso es que te ves yendo para casa un sábado a las 9 de la noche y te acaba pareciendo las 12.

Pero en fin, son sus costumbres. Yo creo que no disfrutan de la vida tanto como los españoles, luego así dicen que somos unos vividores. No me parece ser unos vividores, sino disfrutar cada día. Después se van nuestro país a desfasar por todo el año.

Otra cosa que me sorprende es lo caro que son los trenes. De aquí a Londres son 32 libras ida y vuelta y la duración del viaje no llega a 1 hora y media. Así tenemos que ingeniárnoslas yendo a Stansted y cogiendo un Easybus.

Ahora las cosas buenas. La verdad es que tampoco hay tantas...por ahora jaja.

- La educación. Siempre te dicen "gracias" y "perdón" incluso sin que tengan ellos la culpa. Yo creo que lo tienen metido en la cabeza desde pequeños y lo dicen automáticamente, pero se agradece bastante.

-La variedad de comida. Ellos no tienen NADA típico. Podríamos decir que el roast de los domingos, el cuál pude degustar una vez con la familia, pero vamos, que es carne, no tiene mucha ciencia.
Para compensar este vacío gastronómico te puedes encontrar comida de muchas nacionalidades en el supermercado. Inluso polaca (esto lo descubrí ayer y me sorprendió bastante). Eso sí, la comida hindú gana por goleada, se nota que fueron colonia británica.
Por la calle, y sitios que no son grandes, siempre hay comida hindú y china.
Vamos, que no podrás disfrutar de comida típica inglesa pero tienes otras nacionalidades a tu disposición.

- Lo cuidada que tienen esta zona. Essex es un área llena de campos, es decir, rural, que no abandonado. Me encantan las señales de los pueblos en un poste de madera y las casitas de por aquí. La verdad es que son de cuento. Las casas son jardín lo tienen arreglado, no como pude comprobar por el norte de Inglaterra, que pasaban un poco de ello.

-Poder ir vestida como te de la gana. Esto también sería una cosa negativa porque ves a cada uno...incluso en pijama por el supermercado. Pero gracias a eso, si algún día te apetece ir de cualquier manera, tranquilos,  nadie se va a quedar mirando para tí, están curados de espantos.




Una cosa importante: sin coche no eres nadie. A no ser que vivas en Cambridge, Chelmsford, Braintree o Colchester  o cualquier otro "gran pueblo" o "pequeña ciudad". Por el contrario dependerás del autobús que, según tengo entendido, no tienen un horario muy amplio. Por suerte, nosotros, contamos con él y, dentro de unos límites de distancia podemos ir a donde queramos  (sin ir a Escocia, como dijo Caroline).

Y nada, esto es lo que hay. Hay que tener en cuenta todas estas cosas  hacerse a ellas, cosa que a veces cuesta.




Y ahora, una selección de comida española que podemos encontrarnos por aquí.

































Como véis es todo chorizo y paella. Aquí no hay fabes, ni morcilla, ni chorizo criollo, ni queso cabrales...pero éso siempre estará en Asturias esperándonos, de momento sigamos descubriendo esto.